OJALÁ ESTA IMÁGEN SIRVA PARA HACER SABER QUE ESTO ES UN DEPORTE SIMPLEMENTE
Seguramente sea ya una de las postales argentinas recorriendo portales del mundo. Ocurrió que al finalizar el partido y tras el gol de Boca, Ezequiel Unsain se lamentaba de rodillas cuando un niño se metió corriendo a la cancha y fue a abrazarlo.
Fue sin dudas la imagen que cerró el día del niño. Un consuelo tan inesperado como necesario y emotivo para un Ezequiel Unsain que no podía creer cómo el partido se les escapó en el cierre. La emotiva postal se llevó todas las miradas y el gesto del nene movió el lado sentimental más profundo de los protagonistas.
La acción se originó luego del pitazo final, apenas segundos después del gol de Luis Vázquez que le daba la victoria a Boca, cuando el arquero de Defensa y Justicia cayó postrado de rodillas con mucha rabia y tristeza por el resultado.
El guardameta comenzó a golpear el césped, miraba anonadado hacia el frente con los brazos en la cintura y se mordía los labios en ademán de rechazo. Hasta que llegó corriendo alguien que logró sacarlo por un momento de ese vacío.
Un niño se metió en el campo, corrió por entre los jugadores y fue directo a abrazar a Unsain. El arquero, que seguía de rodillas, le devolvió el abrazo a su fanático con mucha empatía. Un sueño para el pequeño hincha y un consuelo para el 1 del Halcón.
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